marzo 13, 2012

Mitología moderna: Cassandra I


Κασσάνδρα en la playa


And as I sit here on the sand,

This ocean makes me feel so small

Blackmore’s Night, Spirit of the Sea


Ellos la llaman loca, como a la griega. Yo la llamo Sandy. A veces su cabeza se llena de dolores y de imágenes, pero no son profecías, son sus sueños. Y yo soy uno de esos sueños, hecho de agua y arena y noche.

Sandy se tumba sobre la arena para contar estrellas. Una dos tres cien. Son más de las que podría contar en una noche, en una vida. Sandy se ha quedado dormida, el agua la arrulla con su canto y con sus caricias. Y aquí estoy, con los ojos depositados sobre el cuerpo de Sandy, con las manos depositadas sobre los muslos de Sandy, con el pulso y el aliento y el aroma. Sandy suspira en sueños, separa los labios ligeramente, dice algo que no alcanzo a escuchar. Su pecho baja y sube como las mareas. Nuestras vidas son las mareas, son los océanos.

Me atrevo a besarla, a sentirla, a dejarme sentir. Sólo soy el sueño de la fiebre de Sandy. Pero soy real. Aquí estoy. Este cuerpo me abraza. Este mismo cuerpo abraza a Sandy. Nuestro abrazo son cuatro. Sandy no despierta y dentro de ella misma duerme. La amo. Haremos el amor. Es inevitable, como lo es también que Troya haya sido invadida.

Nuestro hacer es playa y mar, es agua y arena, es sueño y vigilia, es cuerpo y espíritu. Sandy se mueve como pleamar, sin abrir los ojos. La media noche ha quedado atrás. Las estrellas han comenzado su éxodo. Me vierto en Sandy como una ola y el primer oleaje de la mañana sacude el cuerpo de Sandy, cubriéndola de sal y agua y arena. La luz traspasa el manto de mar y Sandy, en un estertor, despierta. Y ya me he ido.